El éxito de Winona Riders no ha sido casual. Desde 2018 los nuevos “chicos malos del rock” vienen cautivando a una gran audiencia con su actitud rebelde, el rechazo a la tibieza y su capacidad para crear un viaje psicodélico acompañado de guitarras que invitan a mover los pies. Su propuesta musical es una mezcla virtuosa de garage rock y neopsicodelia, con toques de post-punk y stoner. Un detalle que distingue a la banda es su autenticidad: sin excusas, siempre se presentan con la misma intensidad, sin importar la cantidad del público. Ellos están allí para dar todo, sin importar el lugar.
Toda esa potencia se derramará esta noche en el Teatro Puerto Libertad (Las Piedras 1.850), donde la banda presentará desde las 22 su último álbum: “No hagas que me arrepienta”. El disco marcó un punto de inflexión en el sonido de la banda, combinando nuevas fusiones y sus letras que juegan con la política argentina, lo contestatario, las sexualidades, el desorden y las inseguridades. De todo eso habló el cantante y guitarrista Ariel Nigrelli con LA GACETA.
- ¿Ustedes son la banda que siempre quisieron ver en vivo?
- Nos estamos divirtiendo, porque nos gusta todo lo que hacemos. Lo hacemos a nuestra manera, somos inteligentes en lo que buscamos y en cómo invertimos.
- En un contexto donde el arte está muy subestimado, ¿cómo se manejan siendo una banda autogestionada, teniendo en cuenta los elevados costos para organizar un show?
- Hay una cuestión de (falta de) apoyo del gobierno que hace todo más difícil. Tiene su encanto, no lo voy a negar, pero es más divertido. Se pone todo más contestatario, y nos divertimos. Es mejor que estar en un país donde ni siquiera podés hacer nada y todo queda estancado. Sabemos que la situación está difícil, pero nadie dijo que iba a ser fácil. Esta es la vida que elegimos. Por eso, de manera inteligente, seguimos trabajando. Queremos que la mano que nos alimente sea la nuestra, no la de nadie más.
- Cuando hablas de ser inteligentes al momento de trabajar, ¿a qué te referís?
- Queremos tocar lo más posible, seguir sacando discos, presentar nuevos temas. Lo que para otros es un costo, para nosotros no lo es. No hay un momento específico para que las cosas sucedan, pasan cuando tienen que pasar. Tratamos de invertir en la banda, en la producción de shows, sabiendo lo que implica y los riesgos. Trabajamos de manera inteligente con el merchandising, ofreciendo productos de calidad, ediciones especiales, discos en diferentes formatos, pósters que el público más fiel quiere, remeras de excelente calidad y buenos diseños. Todo eso es un plus que va directamente a la banda.
Winona Riders estuvo cerca de llamarse Lou Reed en homenaje al mítico músico, cantante y compositor. Aunque sus influencias son más que evidentes, no intentan ocultarlas. Se sumergen en los sonidos de The Stooges, The Velvet Underground, Spacemen 3 y The Jesus and Mary Chain, combinando ese ruido de garage rock y stoner clásico. Esas referencias fueron solo el punto de partida para lo que luego sería el proyecto musical que conocemos hoy.
En 2023, la banda participó en más de 60 shows y tuvo destacadas participaciones en festivales como el Banderas, Primavera Sound Buenos Aires y Lollapalooza, donde cerraron su set con una bandera que incendió las redes sociales. Además, vivieron el orgullo de ser teloneros de bandas de San Francisco, como The Brian Jonestown Massacre, y de los australianos King Gizzard & the Lizard Wizard.
En 2024 marcaron un hito con su primera gira internacional, agotando entradas en Uruguay, Brasil, Perú y Chile. Actualmente, se encuentran de gira por el norte y luego seguirán su recorrido por Cuyo. Y lo que se viene a fin de año es -nada menos- el debut en Europa.